05 abril 2010

UN DOMINGO DE MALA SUERTE (Parte 2)

Tras tal desilución en el restaurante, les ofrecí a mis padres pasar por un postrecito, asi que pasamos por Maga el cual estaba en el camino a casa.


MAGA... y sus kilos extras de azúcar.


La verdad me habian hablado tanto y leído tantos comentarios acerca de esta dulcería que no dudé y decidí probar uno de sus suspiros. Me compré el suspiro de higos. El cual luego de la primera cucharada vi mi futuro... un coma diabético o las puertas abiertas a la diabetes.


Demasiado...no me gustó, esa es la verdad, la impresión que me dió este postre es que a la base de manjar le habian añadido mermelada de higos.


Mi mamá pidió el arroz con leche, el cual tambien estaba demasiado dulce, y nada especial.

El que si logró salvarse raspando fue el flan de caramelo de mi papá, una porción pequeña para el precio. En si, los precios con relación al tamaño me parecen altos.


Si bien se dice que los peruanos somos dulceros, creo que en este sitio se lo tomaron muy al pie de la letra.
Creo que si le bajan la cantidad de azúcar a los postres , estos serian agradables.



3 comentarios:

Maestro_RoShi dijo...

Hahaha. Yo pensé que ibas a rajar de la atención. En cuanto a tu crítica, a mi sí me gustan sus suspiros (son recontra dulcero) y su arroz con leche y manjar blanco me parece el mejor que he probado en toda mi vida (y he probado un montón).
La otra cosa mala de este sitio es que desde que fue Gastón los dulces se acaban rápido, y a la dueña parece habérsele subido los humos porque no hay una atención esmerada.

Gabriela dijo...

Yo he probado su maná, y como dulcera que soy, me encantó. A ver, me daré otra vuelta para probar otra cosa y ver si mi opinión cambia o se mantiene.

Anónimo dijo...

yo probé un tres leches y nada especial he probado mejores.. te doy la razon demasiado dulce... a los dos bocados ya no quise mas.